(Fotografía: Linterna natural, Altea 27 de julio de 2009, Sara Caballero)
Aquella noche inundada de velas,
de cánticos y sentencias,
silencios y bullicio,
de comprensión e indiferencia,
de contradicción.
La contradicción del que siente,
el pavor del que prefiere no querer y ansia el recuerdo presente de lo efervescente.
De camino por la línea blanca de la locura la duda era pensada, sopesada y pisoteada.
Pero daba igual porque ya no importaba el final.